Centenario del natalicio del poeta Aquiles Nazoa

Venezuela recuerda a Aquiles Nazoa



En coincidencia con el Día Nacional de la Poesía, el historiador guariqueño Felipe Hernández recordó al poeta, narrador y humorista Aquiles Nazoa, a cien años de su natalicio.



Reconocido escritor, periodista, poeta y humorista venezolano(Caracas, 17-05-1920 // †Autopista Regional del Centro, entre Caracas y Valencia, 25-04-1976). Hermano del también poeta Aníbal Nazoa y padre del humorista y escritor Claudio Nazoa Laprea. 100 años del natalicio del hombre que creyó en los poderes creadores del pueblo, en su obra se expresan los valores de la cultura popular venezolana. El siempre querido y recordado Aquiles Nazoa, el ruiseñor de Catuche, el Poeta del Guarataro que describió con genialidad lo cotidiano y lo sencillo de los venezolanos y de la venezolanidad de nuestra historia y sus tradiciones… Aquiles, el de la eterna vigencia. El de “Humor y Amor” su obra cumbre…

En su memoria, dos de sus poemas:

EL CREDO

Creo en Pablo Picasso, Todopoderoso, Creador del Cielo y de la Tierra;

creo en Charlie Chaplin, hijo de las violetas y de los ratones,

que fué crucificado, muerto y sepultado por el tiempo,

pero que cada día resucita en el corazón de los hombres,

creo en el amor y en el arte como vías hacia el disfrute de la vida perdurable,

creo en el amolador que vive de fabricar estrellas de oro con su rueda maravillosa,

creo en la cualidad aérea del ser humano,

configurada en el recuerdo de Isadora Duncan abatiéndose

como una purísima paloma herida bajo el cielo del mediterráneo;

creo en las monedas de chocolate que atesoro secretamente

debajo de la almohada de mi niñez;

creo en la fábula de Orfeo, creo en el sortilegio de la música,

yo que en las horas de mi angustia vi al conjuro de la Pavana de Fauré,

salir liberada y radiante de la dulce Eurídice del infierno de mi alma,

creo en Rainer María Rilken héroe de la lucha del hombre por la belleza,

que sacrificó su vida por el acto de cortar una rosa para una mujer,

creo en las flores que brotaron del cadáver adolescente de Ofelia,

creo en el llanto silencioso de Aquiles frente al mar;

creo en un barco esbelto y distantísimo

que salió hace un siglo al encuentro de la aurora;

su capitán Lord Byron, al cinto la espada de los arcángeles,

junto a sus cienes un resplandor de estrellas,

creo en el perro de Ulises,

en el gato risueño de Alicia en el país de las maravillas,

en el loro de Robinson Crusoe,

creo en los ratoncitos que tiraron del coche de la Cenicienta,

el Beralfiro el caballo de Rolando,

y en las abejas que laboran en su colmena dentro del corazón de Martín Tinajero,

creo en la amistad como el invento más bello del hombre,

creo en los poderes creadores del pueblo,

creo en la poesía y en fin,

creo en mí mismo, puesto que sé que alguien me ama…

 

SERENATA A ROSALÍA

Levántate, Rosalía

a ver la luna de plata

que el arroyuelo retrata

y el lago fotografía.

 

Levántate, vida mía;

¡anda, pues, no sea ingrata!

Levántate con la bata,

o sin ella Rosalía.

 

Ay, levántate mi nena:

sé complaciente, se buena

y ¡levántate, por Dios!

 

¡Levántate, pues trigueña,

que esta cama es muy pequeña

y no cabemos los dos!

 

                

* UNESR // Cronista del Municipio Leonardo Infante // fhernandezg457@gmail.com

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