El incisivo punzón de los hombres de la Edad de Piedra
La revolución de la piedra y el surgimiento de la técnica despertó un cambio en la evolución del hombre. Algunos utensilios relatan el progreso y la adaptación que el hombre hizo por sobrevivr. En el siguiente artículo el profesor Arcadio Arocha, maestro de Historia de Venezuela por la Universidad Rómulo Gallegos,no explca esta etapa de la humanidad
IMAGE WEB | La Edad de Piedra corresponde con la primera era o etapa de lo que se conoce como la Prehistoria.
M.H.Alimen y J. Steve.
Arcadio Arocha
Se puede ratificar que en la comunidad humana, el perfeccionamiento de la cultura ha desplazado, en el escenario, el lugar que poseía primeramente en la evolución orgánica y es la arqueología la ciencia que se encarga del estudio de este avance y su materia prima o sus documentos principales son los utensilios, armas y chozas realizados por el hombre en el pasado, con la finalidad de obtener alimentos y abrigo. Son los que nos muestran el mejoramiento de la destreza técnica, la acumulación del conocimiento y el progreso de la estructura económica para responder a la subsistencia.
Un utensilio terminado, con manos humanas, es una muestra de habilidad manual. Además, revelan el desarrollo mental del autor y es la medida del conocimiento científico de su época. Es así como todo instrumento refleja la realidad de su tiempo, aunque lo haga de manera imperfecta.
Otro punto que destacar para este tema, es que los historiadores tienen que recurrir a otras ciencias auxiliares de la historia por la falta. entre otros aspectos, de la escritura. Entre ellas tenemos: la arqueología, la antropología, las matemáticas, la geología, la física, la zoología, la química, la botánica, la paleobotánica, el arte, la técnica, la arquitectura, la geografía, la cronología, la sociología, la lingüística, la historia de las religiones, la filosofía, la topografía, la paleontología entre otras. No existe ciencia social que, de alguna u otra forma, no tenga relación con el estudio de la historia.
Los avances en la Edad de Piedra
Gracias a la arqueología la historia ha podido reconstruir el proceso de evolución de la humanidad y su desarrollo con criterios cronológicos y narrativos. Al respecto este último concepto es definido por el historiador Roberts, con el siguiente argumento:
“El término "narrativa" ofrece otra pista acerca de mi criterio: siempre he mantenido la opinión de que la cronología es el cimiento de la historia y que los historiadores deben extraer un relato del maremágnum del dato. El relato de esta historia tiene como protagonista a una humanidad en evolución.” (Roberts, 2005; p.7).
Se trata de explicar las interconexiones y relaciones entre territorios y personas Muchas veces retiradas entre sí, por largas distancias, relación entre el espacio y el tiempo, para que se haga evidente su contribución al todo. En este sentido, la Edad de Piedra está dividida en tres eras: la Eolítico, la Paleolítico y la Neolítico. “Comenzó hace diez o quince mil años y termino con la Edad del Bronce en varias localidades y en épocas diferentes: hacia el año 4.000 a. de C., en Egipto; hacia el 3.000 a de C., en Britania y Escandinavia, etc.” (Barnes, 1955; p.7).
Estos dos últimos términos el Paleolítico y el Neolítico fueron introducidos por el historiador John Lubbock (1834-1913) y que abarcaron medio millón de años. La era Eolítica Donde el hombre utilizo piedras cortantes como las encontraba en la Naturaleza. Mientras Paleolítico era una economía de industria y cultura de carácter predadora, que comprendía la caza, la pesca y la recolección de frutos silvestres, como nueces, raíces, bayas y hierbas. Las industrias indispensables eran las de piedra y el vestir con pieles de animales. El hombre utilizo el aguzado de punta de piedra y tallado de núcleos de piedra con lo cual logro filo cortante.
El arma y la herramienta fundamental del Paleolítico fue el hacha de mano hecha de sílex; también llamado pedernal, la cual es una roca que se presenta en la naturaleza bajo el aspecto de guijarro o de placas. El hacha de mano de forma de almendra, que podía ser fabricada por cualquiera, seguramente surgió por azar, para la satisfacción de todas las necesidades humanas, a tal punto que el hombre la uso durante miles de años. Con ella según su agarrado se podía usar como hacha, raspador, navaja, daga y punzón. De la industria del Paleolítico lo que más se ha conservado son los fabricados de piedra, huesos, asta y marfil; también, algunos de madera para algunos utensilios. Pero, lo principal de estas industrias es la muestra de que solo el hombre está en capacidad de hacer: la repetición de la forma lo que implica un aprendizaje y la trasmisión del mismo. La experiencia, de gran importancia, es que con ella, se trasmite los conocimientos y habilidades.
Con respecto a la industria ósea y otros materiales, estos se caracterizaban, al principio, como rústicos e insuficientes. Al comienzo sobre hueso, asta y marfil apareció el anzuelo, la aguja de hueso con perforación que suplanto un avance para la confección del vestir: De este modo se obtiene información sobre la evolución no solo de la industria de piedra o lítica sino también sobre los cambios tecnológicos de la humanidad paleolítica y de la estética.
La innovación más importante, después de la industria de la piedra y la industria ósea en el paleolítico, fue el descubrimiento del fuego de forma artificial frotando entre sí dos piezas de madera. El arte de hacer fuego fue fundamental y revolucionario para la humanidad. Fue un descubrimiento que produjo avances culturales, sociales, económicos y tecnológicos. Con él existe la posibilidad de luz, y la prolongación de su entorno hacia el frio o el calor y hacia la oscuridad o claridad, primordialmente para la comodidad en las cuevas podían, expulsar a los animales y mantenerlos alejados mediante el fuego. La tecnología progreso; las lanzas se endurecían a través del fuego, además se podían cocinar los alimentos entre otra cosa.
Igualmente, el aporte más importante de la Prehistoria o Edad Preliteraria, (5.000.000 a.C-3.000 a.C.) es el invento de las herramientas. “Las primeras herramientas no fueron el resultado de la reflexión, sino del azar. Las herramientas humanas fueron descubiertas antes de ser inventadas.” (Barnes, 1976; p.5). Fue lo que tuvo el hombre para dominar la Naturaleza hasta la aparición de la maquinaria moderna. El término de prehistoria fue creado por Daniel Wilson (1816-1892).
Luego, las industrias esenciales aparecieron después del Paleolítico. No existía la agricultura ni la crianza de animales. A excepción, en algunas partes, se realizaba la domesticación o auto domesticación del perro. Todavía no existían ni la industria textil ni la cerámica. Todos estos progresos surgieron en el Neolítico.
La Etapa Neolítica: La última fase de la Edad de Piedra
La piedra pulimentada es del Neolítico. “Comenzó hace diez o quince mil años y terminó con la Edad de Bronce en varias localidades y en épocas diferentes: hacia el año 4.000 a.C., en Egipto; hacia 3.000 a.C., en Britania y Escandinavia, etc.” (Barnes, 1955; p.7).
Además de cazador y pescador, el hombre se convirtió en labrador y pastor. Hubo nuevos inventos como el arco y la flecha en el periodo Neolítico Primitivo, al igual que el hacha cortante de piedra que al final de la etapa se había perfeccionado un mango. En el Neolítico también se mejoró los instrumentos de cuero y hueso, los cuchillos se convirtieron en obras de arte. Apareció un nuevo instrumento de piedra de mucha importancia: la piedra de molino para moler el grano.
El arco y la flecha fueron los instrumentos más importantes de este ciclo histórico de la humanidad. “Se trata, tal vez, de la primera máquina inventada por el hombre. La fuerza motriz es, en rigor, la energía muscular humana, pero, en la tensión del arco se va acumulando gradualmente la energía gastada en combarlo, para librarla de una sola vez y en forma concentrada, al disparar la flecha.”(Gordon, 1954; pp.77-78).
Es así como de esta forma, el lanzador de venablos multiplica ingeniosamente la energía que su brazo humano concede al proyectil.
Igualmente, el doctor en historia Juan Brom (1926-2011) sostiene que el arco y la flecha suponen un desarrollo intelectual y técnico bastante elevado y afirma que tanto el arco como la honda son las primeras máquinas creadas por el hombre.
El Neolítico representa, en su sentido más exacto, una cultura donde los utensilios de piedra pulida o pulimentada sustituyen a los de piedra tallada. No obstante, a veces, se le colocan otros criterios clasificatorios. Por otra parte, el término Revolución neolítica aunque se emplea todavía, es insatisfactorio ya que involucra comprender demasiadas ideas diferentes
En esta etapa de la Edad de Piedra pulimentada, es el periodo donde se va a producir lo que los historiadores consideran la mayor Revolución que se haya conocido en la historia de la humanidad: el remplazo de la naturaleza como el único origen de sostenimiento por la explotación a gran escala a otras importantes fuentes de alimentación: la agricultura.
Hay desconocimiento sobre el origen de la agricultura; pero, se sabe que fue en el Neolítico. Parece ser que el Valle del Nilo era el que mejores condiciones tenia para la agricultura y hay pruebas de que se cultivaban cereales hace unos 10.000 años. Es por esto que Egipto es constantemente considerado como el país de origen de la agricultura. Y con la agricultura aparece la civilización.
El otro paso importante en el camino hacia el progreso fue la domesticación de los animales. Se desconoce cuál fue primero, la domesticación de los animales o las plantas, o tal vez tuvieron lugar casi al mismo tiempo. Puede ser que el hombre comenzó con la domesticación de animales cuando dispuso de un hogar comparativamente fijo y con un terreno limpio. Domestico cabras, ovejas, vacas, cerdos. Con la agricultura y la ganadería surge la densidad poblacional y con ello crece la demanda de alimentos y la producción. El exceso de alimentos trae la especialización, donde sectores de la sociedad que no estaban dedicados a producir alimentos como los burócratas y los artesanos, (los alfareros, los albañiles, etc.).
“La organización de la sociedad artesanal llevó al crecimiento de una economía más compleja y de una sociedad jerarquizada. Fue el nacimiento de la civilización tal y como la conocemos actualmente.” (Mahajan, 2008; p10).
Otro hecho importante para la actividad económica en este periodo Neolítico fue la aparición, de los comienzos del hilado y del tejido, primero con trajes de animales, y como hilo la corteza machacada, después surgió la aguja de hueso perforada. Después los trajes fueron con fibra de lino. El próximo paso fue la cestería y de la esterería. En el Neolítico, la tela era ya tejida en telares de mano, procedimiento que no fue sustituido hasta el primer cuarto del siglo XIX de la Era Cristiana.” (Barnes, 1976; p.10). Así mismo el profesor, egiptólogo, arqueólogo e historiador James Henry Breasted (1865-1935) precisa que la técnica para hilar y tejer el lino en el Neolítico Posterior en Egipto, fue tan perfecta como cualquier otro tipo anterior a la Revolución Industrial (1765).
Al hombre del Neolítico también se le debe la industria de la cerámica, ello significo entre otras cosas, que, el hombre podía trasladar el agua de un sitio a otro y con esto escoger su sitio de habitación con más libertad. Apareció el arte culinario. La cerámica introdujo el arte en el hogar. El horno para cocerla tampoco había aparecido. En este periodo era elaborada a mano, la rueda del alfarero fue inventada en la Edad de los Metales.
Por largo tiempo el hombre del Neolítico utilizo las cavernas de sus anteriores, como habitación. Pero en el Neolítico apareció la arquitectura, la habitación artificial de cabañas como las plataformas en los lagos de Norte de Italia y Suiza. El hombre del Neolítico produjo la conquista de la vida sedentaria, y construyo habitaciones de más calidad. Sus conquistas económicas comprendían la caza, la pesca, la domesticación de animales, industrias ganaderas. Inicio la agricultura, la industria textil y la cerámica.
“También es posible que tenga aquí sus orígenes un conflicto con un gran futuro: el que enfrentaba de nómadas y sedentarios. El poder político pudo tener su origen en la necesidad de organizar la protección de los cultivos y el ganado de los predadores humanos. Podemos especular incluso que las tenues raíces de la idea de aristocracia deben buscarse en los éxitos (que debían ser frecuentes) de los cazadores-recolectores, representantes de un orden social más antiguos, en la explotación de la vulnerabilidad de los sedentarios, atados a sus zonas de cultivo, mediante su esclavización.” (Roberts, 2005; p.60)
Comenzó la especialización de la industria, en las empresas y división del trabajo. Explotación de minas para adquirir el sílex para la fabricación de armas y herramientas utilizando antorchas picos de cuernos del reno y palas de madera. En el Neolítico, el hombre podía satisfacer la mayor parte de sus necesidades, ya practicaba el intercambio comercial, local, regional e intraeuropeo de géneros como el sílex, pieles, sal, concha, ámbar, posiblemente también el ganado. La economía del trueque; aunque se encontraron pruebas de la existencia de monedas en forma de conchas. Al hombre dejar el sistema nómada por el sedentarismo surge el derecho de propiedad.
También se le deben al Neolítico, la rueda creada por los sumerios, la cuadriga, el sello cilíndrico.
Se puede afirmar que al final del Neolítico el hombre estaba entrando a la civilización. No poseía los medios de navegar grandes distancias, tampoco la escritura, ni la técnica para trabajar los metales.Pero ya poseía las principales tecnologías precisas a su disposición. “El Oeste fue adquiriendo del Oriente las conquistas, que hacen épocas, a que antes nos hemos referido. La tarea de conducir a la Humanidad desde la civilización primitiva a la histórica fue llevada a cabo, en la Antigüedad, por el Próximo Oriente.” (Barnes, 1955; p.11)
Inclusive en la parte tecnológica más precisa, la neolítica, en el desarrollo humano no empieza, prospera ni finaliza en todas partes al mismo tiempo. En una parte puede durar miles de años más que en otra, y sus iniciaciones no están distanciadas de lo ocurrido en épocas anteriores por una línea nítida, sino por un cambio cultural. Por otro lado, internamente en este periodo, es que no todas las sociedades poseen las mismas destrezas y recursos; unas aprenden a realizar vasijas de cerámica, unas tienen útiles de piedra pulimentada, entretanto otras avanzan en la domesticación de animales y empiezan con el cultivo de cereales. La regla de la evolución es la lentitud, y las sociedades no avanzan de forma paralela al mismo nivel cuando aparece la escritura. No obstante, afirma Roberts, la cultura neolítica es la matriz de la que surge la civilización.
En la Edad de Piedra se emplazaron los elementos para la vida económica. La mayor parte de las herramientas así como los quehaceres cotidianos de la colectividad de los hombres, desde dicha época hasta la Revolución Industrial del siglo XVIII, empezaron a ser conocidos entonces. La Edad de Piedra fue sustituida paulatinamente por la Edad de los Metales. El triunfo del hombre sobre los minerales se conoce como “el alba de la Historia”. La escritura provino casi paralelamente con la fundición mineral y de la fabricación de las herramientas y armas de metal. Con su aparición los documentos escritos fueron la señal de los “tiempos históricos”.
Bibliografía
Barnes H.E. (1955) Historia de la Economía del Mundo Occidental. México D.F. Editorial Hispano-Americana
Brom J. (1973) Esbozo de Historia Universal. México, D.F. Editorial Grijalbo S.A. de C.V.
Brom J. (1981) Para Comprender la Historia. México, D. F. Editorial Libros de México, S.A.
Mahajan S. (2008) Historia de los Inventos. Desde la antigüedad hasta nuestros días. Barcelona. España. Equipo de Edición S.L., Barcelona.
Roll E. (1942) Historia de las Doctrinas Económicas. Mexico. Fondo de la Cultura Económica.
Gordon Childe V. (1954) Los orígenes de la civilización. México. Fondo de la Cultura Económica.
Pirgnne J. (1972) Historia Universal. Las grandes Corrientes de la Historia. España. Editorial éxito, S.A
Roberts J.M. (2005) Historia Antigua. Desde las primeras Civilizaciones hasta el Renacimiento. Singapur. Editorial Debate, S.