Facebook

Find Us On Facebook


Stay Connected

Instagram

Social Share

300x250

Video Of Day

Nombre

Header Ads

Popular Categories

0pinión Acción Democrática Actualidad Adolfo Rodríguez Africanía Alexis García Muñoz Alí Almeida Alicia Ponte-Sucre Alirio Acosta Analisis Análisis Andres Oppenheimer Andrés Rojas Jiménez Ángel Lombardi Boscán Ángel Rafael Lombardi Boscán Angelo Donnarumma Anibal Romero Antropocultura Arcadio Arocha Argenis Ranuarez Armando González Segovia Arte Artículo Arturo Álvarez D´ Armas Arturo Alvarez D´Armas Ascensión Reyes R Aura Marina Betancourt Autores Bret Stephens Carlos Alberto Montaner Carlos Belisario Carlos Malamud Carlos Maldonado-Bourgoin Carlos Raúl Hernández Christopher Hitchens Ciencia Contacto Crítica Crónica Dani Rodrik Daniel R Scott Darío Laguna David Brooks DAVID TRUEBA Derecho Diego Márquez Castro Domingo Silo Rodríguez Trujillo Edda Armas Eddie Ramírez Edgardo Malaspina Edgardo Rafael Malaspina Guerra Eduardo Galeano Eduardo López Sandoval Educación Eleonora Gosman Elias Pino Iturrieta ELÍAS PINO ITURRIETA ELÍAS PINO ITURRIETA | ELÍAS PINO ITURRRIETA En portada Ensayo Entrevista Ernesto Andrés Fuenmayor Ernesto Ochoa Moreno Esteban Emilio Mosonyi Farid Kahhat Fausto Masó Felipe Hernández Felipe Hernández G Felipe Hernández G. Felipe Hernández. Félix Celis Lugo Fernando Henrique Cardoso Fernando Mires FERNANDO NAVARRO Fernando Rodríguez Mirabal Fidel Castro.NINOSKA PÉREZ CASTELLÓN Foto Francesco Manetto Francis Fukuyama Francisco Olivares Franklin Santaella Isaac Fritz Thomas Gabriel Tortella Gisela Kozak Rovero Gloria M. Bastidas Gustavo Valle Harrys Salswach.- HÉCTOR ACOSTA PRIETO Henri Tincq Historia Historiografía Historiografìa Ibsen Martínez Immanuel Wallerstein Jacques Attali Jacques Benillouche Javier Díaz Aguilera Jean-Paul Brighelli Jeroh Juan Montilla Jerónimo Carrera Jesus Jesús Cepeda Villavicencio Jesús Piñero JESÚS SANCHO Jon Lee Anderson Jorge G. Castañeda José Aquino José Camejo José Luis Centeno José Manuel Aquino José Obswaldo Pérez José Obswaldo Pérez Juan Flores Zapata Juan José Hoyos Julio Londoño Paredes Karelbys Meneses La Revista Laura Weffer Cifuentes Leonardo Rodríguez Libro Libros Literatura Luis Almagro Luis Eduardo Viso Luis Pedro España N Luis Vicente León Manuel Esteban Díaz Manuel Soto Arbeláez Manuel Vicente Soto Arbeláez Manuel Vicente Soto Arbeláez. Marinela Araque Martín Guevara Martín Yeza Mary Roach Massimo Pigliucci Máximo Blanco Michael Dobbs Microbiografía Microbiografías MIRLA ALCIBÍADES Misael Flores Misael Flores. Mundo Nancy El Darjani Nelson Rivera Oldman Botello Opinión Opinón Opinòn Orlando Medina Bencomo Óscar Henao Mejía osé Obswaldo Pérez Pablo L. Crespo Vargas Pablo Pérez Pablo R Pedro Benítez Pedro García Cuartango Pedro Salmerón Pedro Sivira Pensar Educativo Pérez Aragort Perfil Periodismo Personajes Pierre Buhler Por Daniel R Scott Portada Publicaciones Rafael Arráiz Lucca Rafael Gallegos Ramón Cota Meza Rebeca Chaya Reinaldo Bolívar Reinaldo Rojas Relato Robert J. Shiller Rogelio Núñez Roger Herrera Rivas Sadio Garavini di Turno Sergio Ramírez Simón Alberto Consalvi Sociedad Tomás Straka Topnimia Toponimia Trino Márquez Ubaldo Ruiz Uta Thofern V. Loreto Valle de la Pascua Video William Neuman William Ospina Yegor Firsov Yoani Sánchez Yuriria Sierra

Facebook

Ads

Ad Banner

Recent Posts

test

Ads

randomposts
Adbox

Mujeres, política y cultura: Italia e Irán


La victoria de Giorgia Meloni en Italia y las protestas en Irán dan cuenta de la tensión existente entre un mundo globalizado que exige respuestas globales y la resistencia a la posibilidad misma de tales respuestas.


POR Gisela Kozak Rovero

Dos fenómenos recientes protagonizados por mujeres dan cuenta de la tensión existente entre un mundo globalizado que exige respuestas globales y la resistencia a la posibilidad misma de tales respuestas. La victoria de Hermanos de Italia, con Giorgia Meloni a la cabeza, y las protestas en Irán a causa de la muerte de Mahsa Amini, presumiblemente a manos de la policía religiosa, señalan la importancia de los valores, ideas y expresiones culturales más allá del descontento económico, efectivamente existente tanto en una nación como en otra.

Meloni defiende su condición de mujer italiana, afincada en el cristianismo y en la familia “natural” (padre, madre e hijos), amenazada por el feminismo y el “lobby” LGBTQ. Se confiesa, además, defensora de la maternidad y de las fronteras de su país ante la avanzada musulmana.

Las iraníes no rechazan el islamismo sino las imposiciones morales que las convierten en víctimas potenciales de cualquier clérigo ofendido. La teocracia en el poder ha perdido terreno ante las libertades básicas para las mujeres, reclamadas en nombre de un margen mínimo de laicidad y de aspiraciones relativas a la equidad de género. Estas ganancias democráticas se han abierto terreno en el mundo a despecho del autoritarismo al alza, e Irán no iba a ser la excepción.

El triunfo de Hermanos de Italia significa una apuesta por el occidente de raíz cristiana; las y los manifestantes en Teherán y otros lugares proyectan un espacio de libertades individuales compatible con la vida en un planeta interconectado. En ambos casos, las mujeres asumen su derecho a formar parte de la política, aunque sus acciones remiten a tradiciones de pensamiento diferentes. En el caso italiano, se trata del nacionalismo, una herencia moderna cruzada por la identidad, es decir, por la cohesión colectiva cimentada en valores, tradiciones y expresiones convertidas en estandarte del poder del Estado. Meloni ha convertido la exitosa política fascista de la vuelta a las raíces italianas en un fenómeno ahistórico, como si Italia no fuese producto de acciones precisas de agentes políticos sino una esencia intacta, amenazada por la migración.

Quienes protestan en Irán, en cambio, defienden la posibilidad del cambio ante el anquilosamiento de la moral pública, de un ejercicio del poder religioso incompatible no solamente con los derechos humanos fundamentales, cuya inspiración se remite erróneamente de manera exclusiva al llamado occidente, sino con interpretaciones del Corán abiertas a la comprensión de las diferencias y a la variabilidad de los criterios al momento de juzgar el adecuado ejercicio de las personas de fe. Tanto el economista indio Amartya Sem 1 como la filósofa estadounidense de origen turco Seyla Benhabib 2 señalan que la libertad, el pluralismo y el respeto a la vida no son invenciones de occidente y han estado presentes en sociedades y pensadores de muy diverso origen. Desde mi perspectiva, las religiones monoteístas son monumentos patriarcales, pero entiendo que la fe es un tema central para la especie sapiens. En este sentido, las iraníes pregonan otros sentidos posibles de la experiencia religiosa y de la fidelidad a la propia cultura, por no hablar de la opción de no profesar ninguna creencia ultraterrena.

Celia Amorós, 3 filósofa española identificada con el feminismo ilustrado, aporta una idea iluminadora: toda demanda identificable con las desigualdades de género remite a “vetas de ilustración”, a ejercicios de la razón para resolver dilemas sociales presentes en culturas diferentes y en distintos momentos históricos. La guerra de Meloni contra el feminismo es, en cambio, irracional: sin las luchas por la equidad de género no hubiese logrado ser la primera jefa de gobierno de su país, pero prefiere atrincherarse en un antifeminismo que preconiza que este es producto de la globalización de izquierdas, en lugar de reconocer la tradición feminista de la propia Italia. Así mismo, al oponer la universalidad del símbolo cristiano de la cruz al islamismo, convierte un asunto político en religioso e identitario. Es mala fe o pura ignorancia.

No cabe duda de que las reivindicaciones culturales ponen en cuestión al humanismo universalista de estirpe liberal, con su idea del hombre agente y soberano de su propio destino. Toqué este tema en el primer texto de esta serie: cierta concepción de lo humano como esencia que trasciende la contingencia histórica ha muerto y, por ende, el humanismo inspirado en tal concepción.

Sin embargo, la necesidad de pensar en alternativas para vivir juntos más allá de nuestras referencias locales es acuciante. Sobre todo, hay que dejar los atajos y las soluciones fáciles a un lado: la derecha antiliberal, el refugio en la religión y el nacionalismo son otras caras de la izquierda identitaria, igualmente antiliberal y entregada a una suerte de furia emancipadora que no comprende la vida social sino en términos de pura opresión. Sobre este tema versará el próximo artículo.

Este artículo forma parte de la serie Fantasmagorías del pasado: el humanismo, publicado originalmente en la revista mexicana Letras Libres. Gisela Kozak Rovero es escritora y ensayista venezolana, actualmente residenciada en México.

Tal vez te interesen estas entradas