Cuánto le debe Venezuela a Santos Michelena

José Antonio Páez presidente de la República para el período 1831-1835, designa a Michelena Canciller y Ministro de Hacienda. Tiene 34 años. Le toca organizar las cifras de una nueva República, la de Venezuela ya separada de Colombia. De tal modo que estamos hablando del creador de la Hacienda Pública Nacional y del Canciller que negoció el Tratado Pombo-Michelena. Estamos hablando del hombre que negoció la deuda externa. Estamos hablando de un hombre especial. Un estadista ecuánime.
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Por Rafael Arráiz Lucca .-
La semana pasada en la Universidad Monteávila (UMA) en Caracas, tuvo lugar un seminario sobre la vida y obra de Santos Michelena (1797-1848). Lo inauguraron palabras del rector Francisco Febres-Cordero Carrillo y del organizador del encuentro, el profesor Hugo Bravo. Intervinimos el profesor Alejandro Cáceres (UCAB), experto en historia económica y empresarial venezolana, y este servidor (UNIMET). Me concentré en hacer un bosquejo de los 50 años de vida del maracayero Santos Michelena.

Michelena era hijo de Santiago Michelena y Ursaín, proveniente de Oyarzún, agricultor, que casó con una valenciana con historia, María Teresa Rojas, y se dedica desde su llegada a cultivar en los valles de Aragua añil, tabaco y algodón. La pareja tiene 10 hijos, y Santos es el cuarto. Este muchacho se suma al ejército juvenil de la batalla de La Victoria, el 12 de febrero de 1814, y cae preso, pero el jefe realista Cajigal lo deja libre con la orden de que se vaya al exilio. Eso hace. Cajigal creía que le estaba infringiendo un daño y, por lo contrario, le estaba cambiando la vida favorablemente.

Se fue a Filadelfia, y allá estuvo trabajando entre 1814 y 1820, entre los 16 y 22 años. Dicen sus biógrafos, Pedro José Vargas y Simón Alberto Consalvi, que estudió en la universidad, pero ninguno señala en cuál, lo que nos lleva a dudar. En todo caso, no importa, lo que sí es seguro es que trabajó y conoció un país que estaba creciendo bajo el imperio del liberalismo económico y la impronta de ese libro capital para la humanidad: La riqueza de las naciones (1776) de Adam Smith, del que no sólo consta que Michelena leyó con un lápiz para subrayar en la mano, sino que lo citó varias veces a lo largo de su vida.

En esos años de trabajo tuvo una experiencia fundamental para su futuro: la del contabilista, la del que lleva números y conoce a fondo la dinámica de los costos de producción, la oferta y la demanda, todo el universo esencial de la dinámica económica que luego le sería de enorme utilidad. Además, aquellos años filadelfinos fueron una escuela de venezolanidad. Allá vivían Manuel García de Sena, Manuel Palacio Fajardo, José Rafael Revenga, Pedro Gual y Juan Germán Roscio, nada menos. En 1820 se muda a Cuba, donde se casa con Encarnación Bosque, y trabaja en otra empresa como administrador. Regresa a Venezuela en 1822 y se establece en La Guaira. Dos años después está en Caracas y es electo diputado al Congreso de la República de Colombia, en Bogotá. Se muda y dos años después introduce en el parlamento una nueva Ley de Comercio, que lamentablemente no fue aprobada.

En 1826 el vicepresidente de la República, Francisco de Paula Santander, lo designa Cónsul en Londres y allá estará hasta 1828. Estos dos años son claves para entender sus posiciones económicas y su conocimiento del liberalismo. Regresa a Caracas y al ser electo José Antonio Páez presidente de la República para el período 1831-1835, designa a Michelena Canciller y Ministro de Hacienda. Tiene 34 años. Le toca organizar las cifras de una nueva República, la de Venezuela ya separada de Colombia. De tal modo que estamos hablando del creador de la Hacienda Pública Nacional y del Canciller que negoció el Tratado Pombo-Michelena. Esto lo lleva a mudarse de nuevo a Bogotá entre 1833 y 1834. Allá negoció el tema de la deuda externa y la parte que le tocaba a Venezuela de la deuda de Colombia, y logró que los neogranadinos aprobaran los términos del Tratado que nos entregaba la mitad de la península de La Guajira, pero el Congreso de Venezuela se tardó tanto en aprobarlo, que cuando lo hizo en 1839 los neogranadinos ya no lo querían, aludiendo que habían hallado títulos que los favorecían. Se perdió un trabajo consistente que nos hubiera favorecido.

Michelena es uno de los artífices de la Ley del 10 de abril de 1834. Una ley que permitió la libertad de contratos y estimuló enormemente el desarrollo agrícola y pecuario hasta que los precios internacionales bajaron y las ejecuciones judiciales, la entrega de las prendas de garantía, fueron mayores que los beneficios. Pero no hay duda de que funcionó durante diez años, tiempo de gran crecimiento económico en Venezuela, una época de oro. Al ser electo presidente de la República el ilustrísimo doctor José María Vargas, éste lo ratifica en el cargo, hasta que renuncia cuando se les condonó la pena a los que le dieron un golpe militar a Vargas, la llamada “Revolución de las reformas”. No estaba el digno Michelena de acuerdo con que se condonara a los golpistas Santiago Mariño, José Tadeo Monagas, Pedro Briceño Méndez y Pedro Carujo, entre otros.

Cuando Carlos Soublette es elegido presidente de la República, en 1837, lo designa otra vez Canciller y Ministro de Hacienda y luego, cuando Páez es electo de nuevo presidente de la República, Michelena es Vicepresidente, en 1840. Su prestigio es enorme y se presenta como candidato a la presidencia de la República en 1843, pero pierde ante Soublette. Se retira de la vida pública a su hacienda Onoto en Aragua, hasta que regresa como diputado al Congreso Nacional de 1846.

Como vemos, una vida pletórica de contribuciones centrales para la formación del Estado en el siglo XIX. Un estadista de gran calado. Un liberal. Lamentablemente, en el oprobioso asalto al Congreso comandado por José Tadeo Monagas, una verdadera vergüenza, fue herido varias veces y falleció 48 días después. No existía la penicilina, ese milagro de la ciencia médica del siglo XX. ¿Que a Santos Michelena hay que estudiarlo quién lo duda? Es uno de nuestros grandes civiles, constructor de la trama jurídica y civil de aquella República que renacía de las cenizas del proyecto fracasado de Colombia, y halló un ritmo de crecimiento económico como ha habido pocos en nuestra historia. Esa etapa tiene nombres y apellidos: José Antonio Páez y Santos Michelena, entre otros.

@rafaelarraiz

Fuente
: Konzapata.com

Conozca al héroe civil que lo hizo casi todo por la independencia de Venezuela

Redactó el Acta de Independencia de 1810. Redactó la primera Constitución. Redactó el primer estatuto electoral. Fue presidente del Congreso de Angostura. Vicepresidente del Departamento de Venezuela y de Colombia. Su obra más importante estuvo perdida por más de un siglo. Está de cumpleaños. ¿Quién es?

Por Rafael Arráiz Lucca @rafaelarraiz.-
Juan Germán Roscio vio la luz en San Francisco de Tiznados (Guárico) el 27 de mayo de 1763, de modo que se cumplen 255 años de su nacimiento. He escrito ensayos, artículos, he dado conferencias, le he dedicado programas de radio a la comprensión de su vida y su obra y lo seguiré haciendo. Es un venezolano principal que no es conocido, ni distinguido de acuerdo con sus ejecutorias. Recordemos que una de nuestras falencias históricas estriba en que la generación militar prevaleció en el imaginario colectivo por encima de la civil, produciéndose no solo una injusticia sino un desenfoque, ya que la obra de creación de la república fue civil, aunque la consolidación fue militar. Ambas áreas fueron determinantes, pero una no tiene por qué sepultar a la otra.
Roscio era hijo de un inmigrante milanés, Cristóbal Roscio, que se estableció en el estado Guárico, y casó con Paula María Nieves, quien era natural del “pueblo de indios” de La Victoria. De modo que Juan Germán era un perfecto mestizo. Por otra parte: ¿qué hacía un milanés en San Francisco de Tiznados? No sabemos cuándo llegó a Venezuela, pero ha debido ser antes de que Milán dejara de ser territorio de la corona de España. Entre 1559 (a partir del primer Habsburgo, Carlos V) y hasta 1714, la posesión de España del Ducado de Milán fue indiscutible, durante un poco más de 150 años. Sabemos que el “viejo Roscio” se trasladó primero de Milán a la península y luego a Tierra Firme, pero su fecha de llegada no la tenemos a mano.
Los Roscio tenían bienes de fortuna, pero no “limpieza de sangre”, lo que impedía que el niño recibiera educación formal. No obstante, la hija del Conde de San Javier, María Luz Pacheco, respondió por él como si fuera blanco y no sólo estudió primaria y bachillerato sino que fue de los mejores estudiantes de Derecho en la Universidad de Caracas, donde se graduó. Superó un último escollo defendiéndose a sí mismo ante la Real Audiencia de Santo Domingo, ya que venció en la querella que interpuso en contra del Colegio de Abogados de Caracas, que no quería dejarlo ejercer el Derecho porque no era blanco.
A partir de aquí la lista de aportes de Roscio es inigualable en la formación de la república de Venezuela. Es el redactor del Acta del 19 de abril de 1810. Con base en ella se forma el primer gobierno que nos dimos los venezolanos, el que emanaba de la Junta Conservadora de los Derechos de Fernando VII. De ese gobierno Roscio fue su primer secretario de asuntos exteriores. En otras palabras, fue nuestro primer canciller. Esa junta le encargó a Roscio la redacción del primer Estatuto Electoral que tuvo la nación venezolana, el que sirvió de base para la elección de los diputados del Congreso Constituyente, del que formó parte él mismo. Luego, ese congreso fundacional de la República le encarga la redacción del Acta de la Independencia, el 5 de julio de 1811 y, por si fuera poco, le establece la tarea de redactar la primera Constitución Nacional, aprobada el 21 de diciembre de 1811, y co-redactada con Francisco Isnardi.
Es hecho preso por Monteverde en 1812 y enviado a la prisión en Cádiz y luego en Ceuta, hasta que es liberado y vamos a hallarlo en Jamaica en 1816, en compañía de su amigo el presbítero José Cortés de Madariaga. Entonces, viene su gran aporte teórico y ensayístico, la publicación de El triunfo de la libertad sobre el despotismo, publicado en Filadelfia en 1817. Un monumento como no hay otro en ese período, lo que erige a Roscio como el único hispanoamericano que redactó un estudio completo sobre el tema de la libertad con base en los textos bíblicos. En otras palabras, El triunfo de la libertad sobre el despotismo es el esfuerzo teórico más completo, lúcido, y sumamente bien escrito, que se publicó en todo este período independentista.
De regreso a Venezuela en 1818, Simón Bolívar lo distingue de diversas maneras: redactor del Correo del Orinoco y presidente del Congreso de Angostura, Vicepresidente del Departamento de Venezuela y Vicepresidente de Colombia. También, lo designó presidente del Congreso de Cúcuta de 1821, pero Roscio ya estaba enfermo y murió por el camino, rumbo a su nuevo destino, el 10 de marzo de 1821. Sospechamos que de cáncer, por las descripciones de sus dolencias.
Los venezolanos fuímos tan indolentes con Roscio que este libro que venimos comentando sólo se publicó entre nosotros en 1952, gracias a Pedro Grases, quien halló un ejemplar en una librería en Oxford, y con base en él se editó en el país. Dramático. Después nos preguntamos por qué el caudillismo anida en nuestra psique. Felizmente, esto viene cambiando, y somos muchos los que señalamos los aportes de Roscio, incluso bibliotecas y fundaciones políticas llevan su nombre. Invito a la lectura de su obra capital y al estudio de este civil paradigmático que encarna al criollo, fundador de repúblicas, amante de la libertad y el federalismo, redactor de una Constitución Nacional que fue todo lo democrática que la época contemplaba.
Ojalá y algún día a los guariqueños les anime solicitar que su estado lleve su apellido, el estado Roscio. Es el homenaje que falta, así como el estado Portuguesa debería llevar el apellido Páez, ese otro gran venezolano con el que estamos en deuda. Ambos integrantes destacadísimos de la generación fundadora de la República de Venezuela.

Fuente:Konzapata.com

El encuentro estudiantil de Cronistas e Historiadores... XV años de fructífera labor

Fotografía de Luis Felipe Záa, alumno de 6to grado en el
Colegio "Juan Pablo II" quien hizo una excelente
ponencia sobre "La vida y obra del canario
Juan González Padrón". Foto: Damelis Loreto
FELIPE HERNÁNDEZ G.*
Asistimos al XV Encuentro Estudiantil de Cronistas e Historiadores del municipio Infante que se realizó el jueves 24 de mayo de 2018 en las instalaciones de la sede de la Cámara de Comercio y Producción del Municipio Leonardo Infante. Quince años ininterrumpidos (2004-2018), durante los cuales los alumnos de las escuelas urbanas y rurales de las parroquias Valle de la Pascua y Espino, asesorados por sus maestros, se dieron cita con la historia local de sus comunidades.

La actividad, como siempre, estuvo coordinada magistralmente por la presidenta-fundadora de la Fundación de Historiadores y Cronistas Estudiantiles –FUNDHCROE, 2009--- Prof. Ligia López Puerta y un muy diligente equipo. Al arribar a los tres lustros, la fecha fue propicia para hacer memoria, recuperar lo mejor de lo transitado, explicar y diagnosticar el presente y con esos referentes lanzarse con más fuerza hacia el futuro.

Desde el punto de vista histórico, este aniversario constituye un momento fundamental para comprender y reconocer el valor más profundo de la Fundación de…, que más allá de los desafíos y obstáculos que ha debido enfrentar, jamás se ha resignado a cambiar la esencia de su misión educativa e histórica, abogando por la inclusión y el respeto vocacional de los educandos, en el entendido que son individuos en formación en el estudio de la historia local, de las memorias de cada comunidad, sus singularidades y así dar respuesta a las inquietudes inherentes a la institución educativa donde se forman en tan útil labor, de la mano de un docente asesor y de todo el personal que labora en cada escuela, despertando vocaciones que en el devenir pueden encausar su vida y su hacer en la labor de escudriñador de su historia, generando espacios para optar, decidir y gozar de iguales derechos y posibilidades.

Ante los referentes expuestos, creo necesario volver sobre un artículo de mi autoría escrito en 2014 que titulé: Encuentro de Cronistas Escolares en Valle de la Pascua, donde se lee: En el libro Apología de la Historia o el Oficio del Historiador, el autor francés Marc Bloch inicia la Introducción con la ingenua pregunta: “Papá, explícame para qué sirve la historia”, [le] pedía hace algunos años a su padre, que era historiador, un muchachito allegado mío…”. Y continúa Bloch: “Quisiera poder decir que este libro es mi respuesta. Porque no alcanzo a imaginar mayor halago… que saber hablar por igual a los doctos que a los escolares… reconozco que la sencillez sólo es privilegio de unos cuantos elegidos… conservaré con mucho gusto, como epígrafe, esta pregunta de un niño cuya sed de saber acaso no haya logrado apagar de momento…”. Más que una ilustración didáctica, es una justificación de la disciplina de la Historia ante el necesario examen de conciencia del historiador ante su papel de cuestionador e intérprete de procesos cronológicos y espaciales como factores de referencia.

Con ese norte, el XV Encuentro de… ciñéndose a la programación preparada por sus organizadores, se inició con la interpretación por la coral estudiantil de la EB “12 de Octubre” dirigida por la Prof. Brizeida Aular, de los himnos Gloria al Bravo Pueblo, del Guárico y de Valle de la Pascua; palabras de bienvenida de la presidenta y fundadora del Encuentro, Prof. Ligia E. López Puerta; luego la moderadora Prof. Marlin Villalobos invitó a la Sra. Petra Parra de la Sociedad Socorro Mutuo para que dirigiera unas palabras y recitara una poesía alusiva al evento.

Seguidamente se inició el ciclo de exposiciones… 14 ponencias, entre ellas, la presentada por la niña Andreina Santaella (5to grado), EBN-Rural “Jácome Arriba”, titulada: “Iván E. Rojas… buscador de puntos de agua”, asesorada por las maestras Argelia Escobar y María Castillo. ---Alumno Jesús Alejandro Marín (6to grado) EB “Celestino Párraga Marrero” NER 146, caserío La Pereña: “El conuco y el abastecimiento alimenticio”, asesora: Prof. Miriam J. Torrealba. --- Alumna María Valentina Vargas (6to grado), Colegio Nuestra Señora del Valle: “Honor a la Sra. Lisbeth J. Medina”, asesora: Yajaira de Zamora. ---Alumna Imberly Parra (4to grado) NER 054: “Velorio de Cruz de Mayo en el caserío Apamate”, asesores: maestros Nuarwuin Higuera y Anthony Álvarez. ---Alumna Victoria Celeste González (5to grado), EB “Clara Matos Arzola”: “La Sociedad Socorro Mutuo, una institución…”, asesora: maestra Rosmivelli Infante. ---Alumno Luis Felipe Záa (6to grado), Colegio “Juan Pablo II”: “Vida y Obra de Juan González Padrón”, asesor: Absalón Zambrano; entre otras participaciones de los planteles: EB “Andrés R. Fuentes” del NER 146; UE-DC 33 “Los Caobos”; EB Rural “San Pedro”; UE “Jesús López Escobar” Zanjonote de la montaña; UE “Lourdes Camero Ramírez”; UE “Apamate”; GEN “Juana Josefa Vargas” y UE Rural “Mamonal”, etc.

Vale considerar que la enseñanza de historia en la escuela primaria tiene como objetivo despertar en los alumnos una curiosidad sobre los acontecimientos históricos. En ese orden, en cada ponencia se planteó que los alumnos adquiriesen conocimientos básicos del pasado de sus comunidades, del Guárico y del país, para que con estos saberes desarrollen habilidades y destrezas que le permitirán comprender mejor el mundo y buscar explicaciones conforme a las dudas que se les vayan presentando, lo que conllevará a descubrir su identidad como individuo y los cambios que ha tenido la sociedad y su entorno geoespacial.

En esta XV edición, muchos docentes, personalidades y un nutrido público se dieron cita en el acto, entre otros, el eterno maestro de generaciones, Prof. Elpidio Barrades Martínez, la Prof. Teresa Navarro de Aguilar, Prof. Maritza de Michelangelli, Prof. Héctor Ortega, la directora del Colegio “Juan Pablo II, Prof. Carmen de Ortiz, los profesores Yendy Gámez, Rosa Vidal Marruz, Filiberto Alpón, Rosaura Valdez, Dr. Fernando Aular y señora, doña Cándida de Álvarez y doña Petra Parra de la Sociedad Socorro Mutuo, medios de comunicación... Finalmente, un merecido reconocimiento a la Prof. Ligia López y al equipo integrado entre otros por los docentes Lisbeth de Candiago, Rosa Pastora Ortega, Ana Carmen Zuniaga, Elizabeth Arévalo, Zoraida Rebolledo de Pérez, Lola Rodríguez, Arturo López, Ada Loreto, Marlin Villalobos, Ramón Correa… y un largo etcétera... adelante siempre.

*UNESR-Cronista del Municipio Leonardo Infante // fhernandezg457@yahoo.com