Una cayena roja en la tumba de Lina Ron

Una cayena roja en la tumba de Lina Ron
Su error fatal fue decir que ella obedecía a dos líderes, Chávez y Diosdado. Lina no tenía por  qué conocer la patología mental de los tiranos " Todas las cosas son ya dichas; pero como nadie escucha, hay que volver a empezar siempre". André Gide. por Rafael Poledo Lina era de los Ron del valle del Uñare. Una familia de los llanos orientales que ha dado a la república personalidades de peso, políticamente diversas, pues Ron los hubo y los hay adecos, perezjimenistas, copeyanos, urredistas y chavistas cual Lina. Se distinguieron y distinguen por su energía y su temperamento emotivo, aunque Lina merece atención especial, porque en su caso hubo un factor de resentimiento que no debería mirarse con la superficialidad que nuestra clase media pasa sobre los temas importantes. Hablo de la clase media porque ella es la base de toda sociedad funcional. Los ricos no. Esos están ocupados rindiendo sus reales y no tienen tiempo para la patria. Los pobres tampoco. Esos no pueden pensar sino en…

Sobre el autor

José Obswaldo Pérez
Licenciado en Comunicación Social, con una maestría en Historia de Venezuela. Investigador y ex-cronista de la ciudad de Ortiz, estado Guárico

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