Libros

Facundo: civilización y barbarie

El autor englosa y sintetiza la obra del argentino Domingo Fautino Sarmiento: Facundo (1845). Una producción literaria que enmarca dentro de la novelistica del dictador. Una de las piezas fundacionales de este género.



Edgardo Rafael Malaspina Guerra


I


Facundo: Civilización y Barbarie (1845), de Domingo Faustino Sarmiento, trata del poder y su relación con la historia, los factores telúricos y la idiosincrasia del pueblo argentino en particular, pero también de la raza latinoamericana. La obra ha sido catalogada como investigación histórica, tratado sociológicos, novela, ensayo, literatura de no ficción, panfleto político ,etc. Por esa ambigüedad a la hora de calificarla algunas la consideran la pieza fundacional de la novela del dictador.


II

Sarmiento habla de Facundo Quiroga , caudillo de las pampas argentinas que recurrió al terror para imponer su ley entre 1820 y 1830. Este cuadro del gobierno autoritario se complementa con descripciones de la tiranía de Juan Manuel de Rosas quien gobernó Buenos Aires de 1829 a 1832 y nuevamente de 1835 a 1852.

“¡Pedidle al espíritu de Facundo y de Rosas una sola gota de interés por el bien público, de dedicación a algún objeto de utilidad; torcedlo y exprimidlo, ¡y sólo destilará sangre y crímenes”!

“Facundo se daba aires de inspirado, de adivino, para suplir a su incapacidad natural de influir sobre los ánimos. Rosas se hacía adorar en los templos y tirar su retrato por las calles, en un carro, a que iban uncidos generales y señoras, para crearse el prestigio que echaba de menos”


III

Facundo representa al gaucho, la provincia, es el caudillo de la pampa. Rosas es el déspota culto citadino; y ambos son la barbarie.


IV

El libro contiene datos de geografía, historia, antropología, biografías, política. Se incluye en las últimas páginas una especie de programa o proyecto para enderezar el rumbo de la nación hacia la prosperidad material y espiritual de la nación.


V

Los tiranos rechazan y hasta atacan la educación, la civilidad, la cultura. Eso conlleva a las miserias sociales y a la inestabilidad política.


VI

La política argentina es un fenómeno telúrico. La barbarie imperante es producto del determinismo geográfico. El campo es la barbarie, la ciudad es la civilización. La población autóctona, ignorante y apática, es contrapuesta a la de origen europea, portadora de la civilización. El gaucho es comparado con el hombre citadino, siendo este último más emprendedor.


VII

La política argentina es un fenómeno telúrico. La barbarie imperante es producto del determinismo geográfico. El campo es la barbarie, la ciudad es la civilización. La población autóctona, ignorante y apática, es contrapuesta a la de origen europea, portadora de la civilización. El gaucho es comparado con el hombre citadino, siendo este último más emprendedor.


VIII

Frases


1

Las convulsiones políticas traen también la esperanza y la luz.


2

Las contradicciones se acaban a fuerza de contradecirlas.


3

Nunca el mal ha triunfado definitivamente.


4

La prensa libre es la enemiga del tirano.


5

La Historia es para el ejemplo, no para la venganza.


6

La poesía es una facultad del sentimiento religioso.


7

Si el pueblo no tiene fe en sí mismo no está preparado para las grandes empresas.


8

El tirano plagia a otos tiranos.


9

El caudillo vuelca su odio contra la civilización.


10

El tirano trata de envilecer a un pueblo culto y hacerle renunciar a toda dignidad personal.


11

El terror es una enfermedad del ánimo que aqueja a las poblaciones, como el cólera morbus, la viruela, la escarlatina. Nadie se libra, al fin, del contagio Y cuando se trabaja diez años consecutivos para inocularlo, no resisten al fin, ni los ya vacunados


12

Las ideas no se matan.


13

Exijo al historiador el amor a la humanidad o a la libertad; su justicia imparcial no debe ser impasible. Por el contrario, es necesario que desee, que espere, que sufra o que disfrute por lo que cuenta.


14

Los cuatro tipos principales de gauchos: el baqueano, el cantor, el gaucho malo y el rastreador. Es importante conocer estos tipos de guauchos para reconocer a los tiranos de Argentina. Facundo fue un gaucho malo.


15

El dilema con respecto a la tiranía es ser o no ser salvaje.


16

La tiranía es atraso en materia educativa, sanidad y cultura en general. La emigración es una consecuencia de la tiranía.


17

Al tirano lo mueve el resentimiento social.


18

Gobernar es trabajar en beneficio de otros.


19

El egoísmo es el fondo de casi todos los grandes caracteres históricos; el egoísmo es el muelle real que hace ejecutar todas las grandes acciones.


20

Siempre he creído que la pasión del juego es, en los más casos, una buena cualidad de espíritu que está ociosa por la mala organización de una sociedad.


21

El tirano tiene un rencor contra la gente decente.


22

El tirano encarcela sin justificación para intimidar. Libera a algunos presos y encarcela a otros.


23

La libertad pocas veces tiene que agradecerle a los genios.


24

La inteligencia vence la materia y el arte al número.


25

La teoría del terror es el talismán del tirano.


26

La Historia, por otra parte, no ha de tejerse sólo con crímenes y empaparse en sangre; ni es por demás traer a la vista de los pueblos extraviados las páginas casi borradas de las pasadas épocas.


27

El mal que es preciso remover es el que nace de un gobierno que tiembla a la presencia de los hombres pensadores e ilustrados, y que, para subsistir, necesita alejarlos o matarlos.


28

La tiranía nace de un sistema que, reconcentrando en un solo hombre toda voluntad y toda acción, el bien que él no haga, porque no lo conciba, no lo pueda o no lo quiera, no se sienta nadie dispuesto a hacerlo, por temor de atraerse las miradas suspicaces del tirano, o bien porque, donde no hay libertad de obrar y de pensar, el espíritu público se extingue, y el egoísmo que se reconcentra en nosotros mismos, ahoga todo sentimiento de interés por los demás “Cada uno para sí, el azote del verdugo para todos”: he ahí el resumen de la vida y gobierno de los pueblos esclavizados.


29

Cuando se ha perdido la conciencia de los derechos civiles , se impone la fuerza brutal.


30

El tirano es un Calígula que se cree un semidios.


31

El derecho de gentes, que ha suavizado los horrores de la guerra, es el resultado de siglos de civilización; el salvaje mata a su prisionero, no respeta convenio alguno, siempre que haya ventaja en violarlo;


32

Los detalles de una batalla las da el triunfador.


33

El terror produce más resultados que el patriotismo


34

El terror entre nosotros es una invención gubernativa para ahogar toda conciencia, todo espíritu de ciudad, y forzar, al fin, a los hombres a reconocer como cabeza pensadora, el pie que les oprime la garganta; es un desquite que toma el hombre inepto armado del puñal, para vengarse del desprecio que sabe que su nulidad inspira a un público que le es infinitamente superior


35

El terror y la obediencia a un caudillo alejan el libre albedrío y ahoga toda individualidad.


Edgardo Rafael Malaspina Guerra es médico e historiador guariqueño. Profesor titular jubilado de la Universidad Rómulo Gallegos(UNERG)

jueves, diciembre 01, 2022

La novela del dictador


Existe una gran número de obras definidas como novelas del dictador. Algunos incluyen La tragedia del generalísimo (1984) de Denzil Romero y El general en su laberinto (1989) de Gabriel García Márquez.


Edgardo Rafael Malaspina Guerra


I


La novela del dictador es un subgénero de la literatura latinoamericana. El autoritarismo en Latinoamérica se inicia con el caudillismo durante las guerras de independencia, continúa con las guerras civiles hasta las dictaduras militares propiamente. Picasso decía que el arte es una mentira a través de la cual llegamos a la verdad; es así que este enfoque peculiar de la escritura de ficción reúne a la historia y la literatura para analizar el poder en general y la dictadura en particular; y hacer una reflexión sobre el origen del despotismo. Se inicia con Facundo (1845) de Domingo Faustino Sarmiento.


II

Existe una gran número de obras definidas como novelas del dictador. Algunos incluyen La tragedia del generalísimo (1984) de Denzil Romero y El general en su laberinto (1989) de Gabriel García Márquez. Particularmente no estoy de acuerdo porque la primera se refiere a Francisco de Miranda quien prácticamente no estuvo en el poder; mientras que El general en su laberinto relata los últimos días aciagos del Libertador quien además fue dictador en el sentido romano del término ; es decir como Cincinato : por un breve periodo y para resolver problemas puntuales.


III

Muchos autores consideran a Facundo un ensayo histórico más que una novela ;incluso dicen que es un libelo contra los caudillos argentinos Facundo Quiroga y Juan Manuel Rosas. Viendo las cosas así, entonces es justo incluir Cesarismo democrático (1919) de Laureano Vallenilla Lanz que con su elogio al gendarme necesario arroja muchas luces sobre las características de una dictadura. Ahora bien, Miguel de Unamuno afirma que Facundo es una novela, y esa calificación nos da derecho a incluir a Doña Bárbara (1929) de Rómulo Gallegos, claramente fraguada contra la dictadura de Juan Vicente Gómez. El título del libro de Domingo Faustino Sarmiento es Facundo: Civilización y barbarie; y Doña Bárbara siempre se ha leído , estudiado e interpretado como el conflicto entre la civilización y la barbarie. ¿Por qué los especialistas no la han incluido hasta ahora en la novela del dictador?


IV

En mi opinión las obras más representativas de subgénero son:

  • Facundo (1845) de Domingo Faustino Sarmiento.
  • Cesarismo democrático (1919) de Laureano Vallenilla Lanz.
  • Tirano Banderas (1926) de Ramón del Valle-Inclán.
  • Doña Bárbara (1929) de Rómulo Gallegos.
  • El señor Presidente (1945), de Miguel Ángel Asturias.
  • Conversación en La Catedral (1969), de Vargas Llosa.
  • Yo el Supremo (1974), de Augusto Roa Bastos.
  • El recurso del método (1974), de Alejo Carpentier.
  • EL otoño del patriarca (1975) de Gabriel García Márquez.
  • Oficio de difuntos (1976) de Arturo Uslar Pietri.
  • La fiesta del Chivo (2000) de Mario Vargas Llosa.

V

En todos esos libros se retrata al dictador latinoamericano así:

  • Buscan el poder ilimitado.
  • Modifican las constituciones.
  • Revocan leyes para relegirse.
  • Exilian o la gente huye del país.
  • Encarcelan a los opositores.
  • Atacan la libertad de prensa: cierran medios impresos, televisivos y radiales.
  • Crean un gobierno centralizado, aunque se dicen federalistas.
  • Cuentan con el apoyo de una camarilla militar corrupta.
  • Quieren controlar el libre pensamiento.
  • Conllevan al país al atraso el cual se manifiesta en crisis: económica,  cultural, alimentaria y sanitaria. No asumen responsabilidades: La culpa de todos estos males se la endosan a los enemigos internos y externos.

Edgardo Rafael Malaspina Guerra es médico e historiador guariqueño. Profesor titular jubilado de la Universidad Rómulo Gallegos

viernes, noviembre 25, 2022

El poder y el delirio

Un mural de Chávez, en pleno centro de Caracas.
>

Ángel Lombardi Boscan

Fue un libro adelantado. Publicado en el 2008 por Enrique Krauze. Lo leímos con entusiasmo en su momento y desestimamos su principal intuición hoy ya cumplida: el chavismo enterró la democracia de partidos y se alió a Cuba para imponer la hegemonía de la “nueva clase”; una nueva oligarquía con apoyo militar que controla la institucionalidad a su medida e interés.

Incluso, en el año 2013, luego del fallecimiento de Hugo Chávez, la sociedad civil pro-moderna y pro-democrática confió ciegamente que el chavismo sin Chávez tendría que ceder.

Los años subsiguientes fueron críticos y la confrontación tradicional a la que estábamos acostumbrados mutó a una de tipo híbrido, arbitraria y violenta, que antes no lo sabíamos y ya hoy sí.

Mientras se ganaban las elecciones parlamentarias del 2015 y se creyó que el retorno democrático, vía institucional, sería un hecho, desde el TSJ controlado por el chavismo, ésta gran aspiración quedó abortada. Luego las masivas protestas del año 2017, de 134 días, en todo el país y con apoyo internacional parecían confirmar nuestra fe en volver a la Democracia. Y resultó que los militares reprimieron a sangre y fuego las mismas y Maduro se aferró aún más al poder.

El año 2019, fue otro escenario más en que las fuerzas civiles pro-democracia lo volvieron a intentar a través de la contra figura de Juan Guaidó y con un importante apoyo de la comunidad internacional. Una vez más se pensó que el chavismo mordería el polvo y la liberación de Venezuela se consumaría restituyendo la soberanía popular y la plena vigencia de la Constitución.

El rompimiento de relaciones diplomáticas con los Estados Unidos agravó aún más el conflicto junto a las disidencias dentro de la misma oligarquía chavista en el poder; que contra todos los pronósticos logró mantenerse en el mismo y demarcar vía represiva a sus más peligrosos opositores tanto afuera como adentro.

Luego, los años de la pandemia: 2021 y 2022, fueron los de su consolidación bajo el desmontaje de los partidos políticos de la resistencia democrática y el arrodillamiento de la sociedad civil amansada desde la eutanasia social en curso.

La bandera de la lucha contra la corrupción y la denuncia de las injusticias y desigualdades sociales que el chavismo enarboló en 1992 yacen en el más completo olvido. Y si resuenan de tanto en tanto es como mentira de Estado. Son tan audaces y caraduras que desconocen a la misma Constitución señalando que en Venezuela no hay división de poderes “sino distribución de funciones”: un poder privado al servicio de ellos mismos que son los que mandan sin contrapesos.

Catorce años después de publicado el libro seguimos creyendo que las protestas pacíficas, civiles y muy justificadas por la mejora de los salarios; el colapso de los servicios públicos; el respeto a los dictados constitucionales o hasta la misma posibilidad de ir a unas elecciones presidenciales para que se vayan del poder por las buenas son agendas legítimas que representan una salida moderna apegada a los códigos de una democracia en pie como la que conocimos entre los años 1958 y 1998.

Resulta que el chavismo no piensa de acuerdo a la gramática política moderna ya que es un proyecto pre-moderno de sociedad cerrada. Y mientras maneje la institucionalidad a su antojo con el control del monopolio de la fuerza seguirá haciendo lo que le dé la gana en aras de su propio beneficio y aliados.

Al resto le impone su propia colonización desde una pavorosa regresión histórica asumiendo la tragedia social de la gran mayoría sin ninguna empatía. Le es completamente indiferente la desgracia de los millones de venezolanos lanzados a la pobreza tanto dentro como fuera del país.

La Venezuela que tuvimos, la próspera y libre, la acabaron. Sus universidades, públicas y autónomas hoy destruidas e intervenidas, son sólo una muestra de esto que decimos. Nuestro sistema sanitario es vergonzoso. Y la seguridad social de los trabajadores la aniquilaron. Nos hicieron un Estado Paria.

El libro de Krauze, escrito por un intelectual pro-democrático, creyó que el legado de Chávez estaría marcado por una heroicidad teatral de imposible cristalización ya que sus dos “padres: Bolívar y Fidel, le eran inaccesibles. Lo cierto del caso es que el verdadero “poder y delirio” lo vino a imponer, contra todo los pronósticos, a quién designó como su sucesor al frente del poder en Venezuela.

Director del Centro de Estudios Históricos de LUZ

@LOMBARDIBOSCAN

domingo, junio 05, 2022

Índice de la revista Nuestra Historia


Por: Arturo Álvarez D´ Armas

La revista Nuestra Historia, es un esfuerzo realizado por historiadores cubanos, mexicanos y venezolanos quienes efectuaron un encuentro en la ciudad de La Habana, Cuba, en los primeros días de marzo de 1991.
Esta reunión trilateral conto con la presencia de los historiadores Julio Le Riverend, Jorge Enrique Mendoza, Nidya Sarabia, Olga Montalbán Lamas, Ángel Gutiérrez, José Napoleón Guzmán Ávila, Arístides Medina, Rutilio Ortega y Asdrúbal González.

El Comité de Dirección Editoral estaba compuesto por Salvador Morales (Cuba), José Napoleón Guzmán (México), Arístides Medina Rubio (Venezuela). Publicación editada en Caracas. Como encargada de Edicón y Redacción de los Números 1 y 2, tenemos a Luis M. de las Traviesas Moreno, de los números 3 y 4, Aritides Medina Rubio y Jorge Bracho.


Nuestra Historia. Caracas: N° 1, 1991. 183 p.


"Presentación". P. III
.
MONTIEL, Pedro J. "Las haciendas cacaoteras de los valles costeros del litoral aragüeño en el siglo XVIII". Pp. 1- 19.


BALBOA NAVARRO, Imilcy. "La ganadería en Cuba entre 1827 y 1868". Pp. 21-34.


SÁNCHEZ DÍAZ, Gerardo. "Cultivo, producción y mercado del añil en Michoacán en el siglo XIX". Pp. 35-44.


GÁRCIGA, Orestes y CÓRDOBA, Mercedes. "Regiones económicas de Cuba en 1862. Distribución regional de la renta rural". Pp. 45-72.


PORTUONDO ZÚÑIGA, Olga. "La caficultura santiaguera y su ruina durante la Guerra de los Diez Años (1868-1878)". Pp. 73-92.


LÓPEZ, María Victoria. "Periodización para la agricultura en el estado de Lara, Venezuela, siglo XIX: el caso de la caña de azúcar". Pp. 93-101.


VIZCAÍNO GONZÁLEZ, Lilian. "El deslinde de las haciendas comuneras y la expansión del latifundio en las provincias de Camagüey y Oriente". Pp. 103-114.


JUÁREZ NIETO, Carlos. "Los orígenes del pensamiento liberal-burgués en Valladolid de Michoacán (1808-1828)". Pp. 115-126.


HERNÁNDEZ DÍAZ, Jaime. "Iglesia y Estado en Michoacán durante la primera mitad del siglo XIX: La República Federal, 1824-1835". Pp. 127-141.


BRACHO, Jorge. "El positivismo en Venezuela. Una reinterpretación". Pp. 143-148.


RUIZ, Gustavo Adolfo. "Primer Congreso Pedagógico venezolano". Pp. 149-162.


CORTÉS ZAVALA, María Teresa. "Cultura y política en México. Los vaivenes de la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios". Pp. 163-174.
"Documentos del Encuentro Trilateral de Historiadores de Cuba-México-Venezuela". Pp. 175-183.
Nuestra Historia. Caracas: N° 2, enero-junio de 1992. 157 p.
VILLEGAS, Silvio. “Las perspectivas de la investigación histórica en Venezuela. (La historia regional y local)”. Pp. 1-13.
AMARO, Leonor. “La enseñanza de la historia en Cuba. Una reflexión necesaria”. Pp. 15-22.
HURTADO, Pablo Emilio. “Enseñanza de la historia de Venezuela en la escuela básica”. Pp. 23-31.
RANGEL DE C., Ana T. “Noción de tiempo histórico en los niños de la escuela básica (4to., 5to, y 6to, grados, ciudad de Barinas”. Pp. 33-39.
VILLAMIZAR, Ysaira. “Un caso concreto de enseñanza de historia en la calle”. Pp. 41-48.
CHÁVEZ, Maria Guadalupe. “Los negros y su integración social en el Obispado de Michoacán”. Pp. 49-57.
PÉREZ GUZMÁN, Francisco. “Esclavos y forzados en las fortificaciones cubanas”. Pp. 59-65.
SILVA MANDUJANO, Gabriel. “Pázcuaro, Michoacán. Perfil histórico de una ciudad capital provincial novohispana”. Pp. 67-78.
CORDERO MICHEL, Emilio. “El antillanismo de Luperón”. Pp. 79-96.
MEITÍN, Enrique A. “El intervencionismo sindical de Estados Unidos en América Latina: etapas y características”. Pp. 97-115.
BOLAÑOS, Federico. “América Latina en deuda: costos sociales y poder transnacional”. Pp. 117-133.
MASSAGUÉ, Esperanza. “El proceso de pacificación en Centroamérica: balance y perspectivas”. Pp. 135-150.
“Crónicas y documentos del Encuentro de Historiadores de América Latina y el Caribe celebrado en La Habana, del 1ro, al 4 de marzo de 1992”. Pp. 151-157.

Nuestra Historia. Caracas: N° 3, julio-diciembre de 1992.
“Presentación”. P. I.
Vetencourt, Dolores. “Los Ferrocarriles en Venezuela 1870-1930”. Pp. 1-9.
MURGUEY GUTIÉRREZ, José. “El ocaso y la desaparición de los ferrocarriles en Venezuela”. Pp. 11-28.
GARCÍA ÁLVAREZ, Alejandro. “El ferrocarril industrial en Cuba”. Pp. 29-37.
DEVES VALDÉS, Eduardo. “La cultura obrera ilustrada chilena y algunas ideas en torno al sentido de nuestro quehacer histórico”. Pp. 39-51.
VINAT DE LA MATA, Raquel. “Las obreras de la aguja: un sector olvidado”. Pp. 53-74.
SANTANA C., Nancy C. “Evolución de la mano de obra familiar en los vales altos del estado Trujillo – Venezuela”. Pp. 75-87.
RUIZ, Raúl R. “El surgimiento de la plantación esclavista matancera marco para el nacimiento del grupo local de presión”. Pp. 89-100.
GARCÍA MÜLLER, Luis. “Proceso de repoblamiento de la Barinas colonial”. Pp. 101-116.
GARCÍA BLANCO, Rolando. “La historia regional en Cuba. Principales problemas científicos y metodológicos”. Pp. 117-133.
Nuestra Historia. Caracas: N° 4, enero-junio de 1993. 150 p.
“Presentación”. Pp. 5-6.
CHÁVEZ CARVAJAL, María Guadalupe. “Los negros en Michoacán: rebeldía y sometimiento”. Pp. 7-17.
BARCIA, María del Carmen. “El proceso de abolición legal de la esclavitud”. Pp. 19-30.
MOLINER CASTAÑEDA, Israel. “Los huidos de la ciudad de Matanzas”. Pp. 31-62.
LÓPEZ, Isaac. “Hato de Estánquez, 1889-1902: Aproximación al estudio de una forma de tenencia de la tierra en los Andes venezolanos”. Pp. 63-72.
GUZMÁN ÁVILA, José Napoleón. “Empresas y empresarios madereros en Michoacán 1880-1915”. Pp. 73-88.
VILLALBA, Federico. “De las totalidades a la formación social”. Pp. 89-101.
PORTUONDO ZUÑIGA, Olga. “Anotaciones sobre la antropogénesis del tiempo histórico. Periodización y regionalidad”. Pp. 103-108.
MELGAR B., Ricardo y HUERTA R., César. “Cultura y región: Análisis de caso”. Pp. 109-115.
PEÑA AGUIAR, Xiomara y PEREIRA ALBA, Aleida. “Experiencias en la utilización de un sistema automatizado de recuperación de la información al servicio de la investigación histórica”. Pp. 117-121.
RODRÍGUEZ PÉREZ, María Eugenia y RAMOS HERNÁNDEZ, Reinaldo. “Análisis del flujo de información documentaria en materia de archivos a nivel mundial. Años (1984-1990)”. Pp. 123-150.

sábado, junio 04, 2016

Edgardo Malaspina: Entre la lectura y la escritura


Recientemente, el médico guariqueño Edgardo Malaspina publicó Medicrónicas (2015), un texto que tiene como pretexto un viaje justificable por el viejo mundo. Un recorrido por Grecia e Italia, travesía que lo lleva por lugares plenos de historias médicas y por espacios cargados de historias humanas.




Por José Obswaldo Pérez

Edgardo Malaspina tiene dos cosas que todo médico debería aprender: La lectura y la escritura. Sí, estos dos actos son dos actividades inseparables y esenciales en la actividad de la medicina. Son el puente para la comprensión y la búsqueda de significado. Una manera de dar sentido al mundo y a nuestra experiencia. Como Miguel de Cervantes señaló en su Quijote que: “El que lee mucho y anda mucho, va mucho y sabe mucho”. O bien, esta máxima norteamericana: Good readers make good doctors (=Los buenos lectores hacen buenos médicos).

Quizás, por eso, el galeno e historiador guariqueño Edgardo Malaspina escribió el libro Medicrónicas Grecorromanas. Crónicas viajeras relacionadas con la Historia de la Medicina (2015). El texto tiene como pretexto un viaje justificable por el viejo mundo. Un recorrido por Grecia e Italia, travesía que lo lleva por lugares plenos de historias médicas y por espacios cargados de historias humanas.

Edgardo Malaspina y Natalia, su esposa, son turistas de este paseo; cada lugar es una experiencia, una anécdota, una descripción, una lectura que vuelve comprensibles los acontecimientos. Malaspina se vale de la crónica, como arte narrativo, para escribir menudas historias de lugares. La toponimia, de ese recorrido, comienza en Atenas, la cuna de la civilización occidental; pero, también, de las ciencias médicas. En Roma, Italia, encuentra los recuerdos de familia. Malaspina es de ascendencia italiana; por eso, la memoria le hace elipse entre Santa María de Ipire y Las Mercedes del Llano con sus ancestros napolitanos.

Medicrónicas es una narrativa de oraciones cortas, amalgamadas con una prosa sencilla y amena, cultivadora y exquisita. Ojalá nuestros estudiantes de medicina tengan el bien de leerla, un buen ejemplo para aumentar la conciencia de los valores y de las perspectivas que se llevan a la práctica.

Con este texto, Edgardo Malaspina realiza un aporte a la historiografía de la narrativa médica. En esta misma línea están sus ensayos sobre Literatura y Medicina (1998) que, además, podemos sumar con Médico de Guardia del doctor Fernando Aular.

martes, septiembre 15, 2015

Studia Africana


Por: Arturo Álvarez D´ Armas

A llegado a nuestras manos el Nº 1 de 1990 de la revista Studia Africana. Esta hermosa publicación pertenece al Centro de Estudios Africanos de Barcelona, España y editada  por Sendai Ediciones; empresa que mantiene la iniciativa de publicar la colección Historia de África.

El investigador Antoni Castel es su director y el Consejo de redacción está compuesto por los africanistas: Alfred Bosch, Ferrán Iniesta –autor del libro “Antiguo Egipto. La nación negra”-, Sebastiá Puigserver, Danielle Provansal, Javier Laviña –quien realizó la transcripción e introducción de “Doctrina para negros”, y Gonçalsanz.

El presente número contiene una pluralidad de idiomas para la elaboración de los distintos trabajos, entre ellos tenemos el catalán, francés, portugués y castellano. Se leerán artículos y notas de especialistas en África, tanto de la Universidad de Barcelona, así como de otras instituciones europeas: Michel Cahen (Mozambique: nation africaine de langue officielle portugaise?); Isabel Castro Henriques (Da virtuosa brandura do branco á preguiça pecaminosa do negro); José Luis Cortés (Aproximación a la vida del esclavo negro en la España de los siglos XV y XVI); Christian Coulon (Le modéle français d´ intégration, les minorités de l´ intérieur et le défi de l´immigration maghrébine); Ferrán Iniesta (Poder i llengua a Madagascar. Reflexions sobre la construcción del modern Fanjakana (Estat); Danielle Provansal (Ethnie, et Hnicité: quelques aspects conceptuels). Con la firma de nuestro amigo, el profesor Luis Beltrán aparece el trabajo “Notas sobre oralidad y política: la sociedadluba”. El profesor Beltrán fue docente durante algunos años en la Universidad de Lubumbashi en la Repñublica Democrática del Congo; Dominique Darbon (Politique fonciére el stabilité é tatiqueau Zimbabwe 1980-1988); Babacar Fall (Les migrations en Afriqueoccidentale: l´exemple des morsi du Burkina Faso); Fermín Guisado (Literaturas negroafricanas: de la oralidad a las modernas narrativas); GrabrielIzard y Javier Laviña (Identidad y rebeldía afroamericana); Alberto Roca (¿Qué fue de la tribu? O el misterio del estado clánico); y de Antonio Santamaría (África: una década ruinosa).

Seguidamente viene un informe del Centro de Estudios Africanos y los equipos de trabajo del CEA; comentarios bibliográficos, resúmenes de los artículos y breves datos biográficos de los autores.


Studia Africana es una publicación de obligada lectura para los estudiosos de las raíces africanas, afroamericanas, de las ciencias sociales, de la historia y necesariamente para toda persona interesada en el pasado y el presente de la africanidad.
domingo, noviembre 10, 2013

Las mil y una historias


Por Adolfo Rodríguez 


Todo hace presumir que cuanto colma la paciencia de Andrés Oppenheimer en su libro !Basta de historias! La obsesión latinoamericana con el pasado y las 12 claves del futuro (Bogotá, 2010), no es más que esa larga tradición discursiva que  distrae de la realidad y pospone, hasta más nunca, las alternativas para un desarrollo autosostenido y sustentable. Esa manipulación del pasado  a la medida del prestidigitador de turno y que, en América Latina, según dicho autor, retarda el acceso a la  economía del conocimiento y su mascaron de alta tecnología  (software y patentes de industria). La nueva tierra prometida que, de acuerdo a sus reportajes y entrevistas,  subyuga, por igual, al  este y al oeste, norte y sur, izquierdas y derechas, socialistas y capitalistas, democracias y dictaduras. Considerando Oppenheimer que un llamado al futuro desoído en la casi total vastedad hemisférica, con excepción de Chile y Brasil. Recomendando, a quienes resuelvan alcanzarlos, proveerse de “una dosis de humildad para darse cuenta acerca de la verdadera posición” en que se encuentran nuestras “grandes universidades y centros de investigación en el contexto mundial”  Sus modelos óptimos, a su entender, la China comunista y Corea del Sur, entre otros. Despliega información acerca de rankings  publicados  en el Suplemento de Educación Superior del Times de Londres o en China, que exhiben, según aquél, cómo de un total de 200 universidades, apenas la UNAM de México figura en el puesto 190. Destacando, el otro, solamente la de Sao Paulo y la UBA argentina, en el numeral 140.  Rezago que atribuye al prurito atascador de preferir el pasado antes que el presente.  Acotando que países con éxitos en el desarrollo sugerido, como  India y otras zonas asiáticos, poseyendo “historias milenarias”, no las  magnifican, ya que de un millón doscientos y pico mil estudiantes cursando ingeniería en China, sólo 16.300 lo hacen  en  historia y  1.520 en filosofía. Que, en mi parecer, no implica ignorancia por parte de aquella juventud orientada a la ciencia y la tecnología, en cuanto al poderoso patrimonio  étnico y natural que los circunda. Si no que éste opera de manera implícita, insinuándose desde el hogar y emanando de cada cosa, palabra, compostura,  adscribiendo, de buen grado, casi siempre, a cuantos las rozan. Saberes y sensaciones que infiltran los más soberbios revestimientos. El mismo Openheimer  historiza y hasta apela al recurso emocional, al sugerir, en la búsqueda de las alternativas postuladas, paranoias que remiten a  dogmatismos históricamente recurrentes. Su experticia, a través de un largo periplo mundial,  la condensa en 400 páginas, de las cuales cuarenta son para referencias bibliográficas y acerca del modo de insertarse en una onda, que, según cifras que suministra, generan el setenta por ciento del producto mundial bruto, en términos de servicios y patentes industriales, frente al decreciente valor de las materias primas. Las claves finales de su propuesta son: educación como “tarea de todos” (programa brasilero), conceptualizar el desarrollo a partir de un PIB educativo, invertir en educación preescolar, capacitar y mejorar el estatus social de los maestros, incentivarlos salarialmente, propiciar pactos de buena voluntad entre actores nacionales (por más que se tuerzan la vista), estimular praxis hogareñas en función educativa, superar el  aislamiento, captar inversionistas de alta tecnología, edificar una “educación internacional”, etc. Estrategias que, a mi parecer,  serán cada vez más pertinentes, válidas, funcionales y atractivas, si se inscriben en los intransferibles marcos culturales de cada país.
miércoles, diciembre 12, 2012
Older →

Un espacio para las ideas...

Con tecnología de Blogger.

Ads Top

160x600

Like and share

Top Menu

[img src="http://3.bp.blogspot.com/-XnuiloUNOA0/VTrt2fyh4eI/AAAAAAAAAa4/Wro4KB-_5CM/s1600/SNewsLogo.png"/] The second monster followed the first, and at that the artilleryman began to crawl very cautiously across the hot heather ash towards Horsell. He managed to get alive into the ditch by the side of the road, and so escaped to Woking

Facebook

Search This Blog

Find Us On Facebook


Stay Connected

Instagram

Social Share

300x250

Video Of Day

Nombre

Header Ads

Popular Categories

0pinión Acción Democrática Actualidad Adolfo Rodríguez Africanía Alexis García Muñoz Alí Almeida Alicia Ponte-Sucre Alirio Acosta Analisis Análisis Andres Oppenheimer Andrés Rojas Jiménez Ángel Lombardi Boscán Ángel Rafael Lombardi Boscán Angelo Donnarumma Anibal Romero Antropocultura Arcadio Arocha Argenis Ranuarez Armando González Segovia Arte Artículo Arturo Álvarez D´ Armas Arturo Alvarez D´Armas Ascensión Reyes R Aura Marina Betancourt Autores Bret Stephens Carlos Alberto Montaner Carlos Belisario Carlos Malamud Carlos Maldonado-Bourgoin Carlos Raúl Hernández Christopher Hitchens Ciencia Contacto Crítica Crónica Dani Rodrik Daniel R Scott Darío Laguna David Brooks DAVID TRUEBA Derecho Diego Márquez Castro Domingo Silo Rodríguez Trujillo Edda Armas Eddie Ramírez Edgardo Malaspina Edgardo Rafael Malaspina Guerra Eduardo Galeano Eduardo López Sandoval Educación Eleonora Gosman Elias Pino Iturrieta ELÍAS PINO ITURRIETA ELÍAS PINO ITURRIETA | ELÍAS PINO ITURRRIETA En portada Ensayo Entrevista Ernesto Andrés Fuenmayor Ernesto Ochoa Moreno Esteban Emilio Mosonyi Farid Kahhat Fausto Masó Felipe Hernández Felipe Hernández G Felipe Hernández G. Felipe Hernández. Félix Celis Lugo Fernando Henrique Cardoso Fernando Mires FERNANDO NAVARRO Fernando Rodríguez Mirabal Fidel Castro.NINOSKA PÉREZ CASTELLÓN Foto Francesco Manetto Francis Fukuyama Francisco Olivares Franklin Santaella Isaac Fritz Thomas Gabriel Tortella Gisela Kozak Rovero Gloria M. Bastidas Gustavo Valle Harrys Salswach.- HÉCTOR ACOSTA PRIETO Henri Tincq Historia Historiografía Historiografìa Ibsen Martínez Immanuel Wallerstein Jacques Attali Jacques Benillouche Javier Díaz Aguilera Jean-Paul Brighelli Jeroh Juan Montilla Jerónimo Carrera Jesus Jesús Cepeda Villavicencio Jesús Piñero JESÚS SANCHO Jon Lee Anderson Jorge G. Castañeda José Aquino José Camejo José Luis Centeno José Manuel Aquino José Obswaldo Pérez José Obswaldo Pérez Juan Flores Zapata Juan José Hoyos Julio Londoño Paredes Karelbys Meneses La Revista Laura Weffer Cifuentes Leonardo Rodríguez Libro Libros Literatura Luis Almagro Luis Eduardo Viso Luis Pedro España N Luis Vicente León Manuel Esteban Díaz Manuel Soto Arbeláez Manuel Vicente Soto Arbeláez Manuel Vicente Soto Arbeláez. Marinela Araque Martín Guevara Martín Yeza Mary Roach Massimo Pigliucci Máximo Blanco Michael Dobbs Microbiografía Microbiografías MIRLA ALCIBÍADES Misael Flores Misael Flores. Mundo Nancy El Darjani Nelson Rivera Oldman Botello Opinión Opinón Opinòn Orlando Medina Bencomo Óscar Henao Mejía osé Obswaldo Pérez Pablo L. Crespo Vargas Pablo Pérez Pablo R Pedro Benítez Pedro García Cuartango Pedro Salmerón Pedro Sivira Pensar Educativo Pérez Aragort Perfil Periodismo Personajes Pierre Buhler Por Daniel R Scott Portada Publicaciones Rafael Arráiz Lucca Rafael Gallegos Ramón Cota Meza Rebeca Chaya Reinaldo Bolívar Reinaldo Rojas Relato Robert J. Shiller Rogelio Núñez Roger Herrera Rivas Sadio Garavini di Turno Sergio Ramírez Simón Alberto Consalvi Sociedad Tomás Straka Topnimia Toponimia Trino Márquez Ubaldo Ruiz Uta Thofern V. Loreto Valle de la Pascua Video William Neuman William Ospina Yegor Firsov Yoani Sánchez Yuriria Sierra

Facebook

Follow Us

Ads

Ad Banner

Recent Posts

test

Ads

randomposts

ABOUT ME

I'M SOCIAL

Adbox